La directora general de Políticas de Género, Angelina Ferreira, expresó que, desde 2020, se duplicó las horas docentes y las instancias de capacitación en respuesta policial con enfoque en derechos humanos, violencia doméstica, de género, sexual hacia niños y adolescentes, y trata, tráfico y explotación de personas. Además, destacó que en Uruguay hay 53 unidades especializadas en la temática.

El ministro del Interior, Luis Alberto Heber, participó en el segundo aniversario de la Dirección Nacional de Políticas de Género, realizado este miércoles 27. Lo acompañaron, además de Ferreira, el subsecretario de la cartera, Guillermo Maciel; el director general de Secretaría, Luis Calabria, y la directora del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Mónica Bottero.

Heber manifestó que la capacitación del personal policial es importante para atender el delito intrafamiliar, al que catalogó como un flagelo difícil de bajar. “Tenemos que poner el ojo y la atención policial con mayor conciencia”, subrayó. 

Ferreira, en tanto, puntualizó que el objetivo de la dirección, en la que trabajan 33 profesionales especializados, es fortalecer y jerarquizar el trabajo que la secretaría de Estado realiza en materia de violencia doméstica y de género.

Señaló que hay 53 unidades específicas para atender casos de esas problemáticas en el territorio nacional y que el 36% del personal del Ministerio del Interior está compuesto por mujeres.

También resaltó que, a través del Portal Educativo y en coordinación con la Dirección Nacional de Educación Policial, se fortaleció la formación virtual del funcionariado a fin de brindar insumos teóricos y prácticos para responder a las necesidades.

La jerarca enfatizó que se desarrolló proyectos, capacitaciones y consultorías con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (PNUD), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y el Centro de Ginebra para la Gobernanza del Sector de la Seguridad.

También sostuvo que se realizará talleres para prevenir la trata y el tráfico de personas y la violencia sexual en varios departamentos del interior del país. 

Expresó, asimismo, que los desafíos son fortalecer el abordaje en la respuesta policial en la temática, puesto que es un pilar fundamental para que las víctimas accedan a la Justicia, y promover acciones para mejorar la respuesta.