El ministro de Defensa Nacional, Javier García, en nombre del Poder Ejecutivo, invistió en el cargo de jefe del Estado Mayor de la Defensa (Esmade), al general del aire Rodolfo Pereyra. En el acto, este jueves 7, participó el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, junto con la vicepresidenta, Beatriz Argimón, y otras autoridades nacionales.

En la ceremonia desarrollada en la sede del Esmade, en Montevideo, también acompañaron al mandatario el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado; el subsecretario de Defensa Nacional, Rivera Elgue, y la ministra de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Irene Moreira.

Estuvieron presentes, además, los jefes del Ejército, Gerardo Fregossi, de la Armada Nacional, Jorge Wilson, y de la Fuerza Aérea Uruguaya, Luis De León, entre otras autoridades e integrantes del Poder Legislativo. 

Pereyra, quien fue investido como jefe del Esmade por el ministro de Defensa Nacional, ocupaba desde 2020 la jefatura del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea.

En rueda de prensa, García recordó que el Esmade reviste una “importancia clave”, ya que lidera la conjunción de las tres fuerzas.

Citó, a modo de ejemplo, que la administración del combustible es uno de los principales insumos que cada una de las fuerzas armadas gestiona en forma independiente. En ese sentido, adelantó que le solicitó a Pereyra un “plan de gestión integral y eficiente” del uso del combustible en cada arma.

Para esto, ya le fue solicitado a Ancap un “diagnóstico técnico” que será un instrumento para estudiar la adquisición, almacenamiento y distribución, para toda la cadena de gestión de los combustibles. El objetivo es que contribuya a utilizar con eficiencia y transparencia estos insumos, que calificó como “críticos”. 

En su discurso, Pereyra señaló que le compete al Estado Mayor de la Defensa ser el órgano de asesoramiento del mando superior de las Fuerzas Armadas y, en particular, del Ministerio de Defensa en materia de planificación y coordinación de las actividades de las fuerzas. Entre ellas, se incluyen las directivas de la política de Defensa Militar para el período 2020-2025.

“Prometo al mando superior y a los integrantes de las Fuerzas Armadas desempeñar el cargo con lealtad, buena fe y empatía”, afirmó, en otro pasaje de su oratoria, luego de reconocer la labor de sus antecesores.