La experiencia de la pandemia de covid-19 presionó y dejó a la vista los puntos débiles de los sistemas sanitarios de todo el mundo, al mismo tiempo que se prevé el advenimiento de nuevas crisis naturales y/o sanitarias a futuro. Mejorar los sistemas de respuesta para esos acontecimientos es uno de los muchos propósitos que se trabajan en las organizaciones de salud internacionales y para ello, el intercambio de las experiencias de los diferentes países es esencial. Con el fin de poder sacar en limpio posibles acciones regionales comunes, Chile organizó un encuentro de alto nivel de líderes latinoamericanos de salud.

El ministro Daniel Salinas expuso en el panel conformado también por los ministros de Colombia y Ecuador, Fernando Ruiz Gómez y Ximena Garzón-Villalba respectivamente, y Paula Danza, asesora presidencial en materia de salud y políticas internacionales de salud de Chile; el presidente Sebastián Piñera dio la bienvenida a los invitados y el ministro de salud anfitrión, Enrique Paris, estuvo a cargo del cierre del evento. Asimismo, estuvieron remotamente presentes la directora de la Organización Panamericana de la Salud, Carissa Etienne, y autoridades sanitarias de los demás países de América y el Caribe.

En Uruguay desde el inicio de la pandemia se implementó un intercambio fluido con la Academia y la ciencia, y sobre uno de los resultados que tuvo este intercambio se centró la exposición de Salinas: el desarrollo de herramientas tecnológicas y sus ventajas.

La Organización Mundial de la Salud brindó desde el inicio de la pandemia lineamientos respecto a los objetivos y medidas claves para la vigilancia integral de covid-19 y se establecía la misma como uno de los pilares fundamentales para el control de la pandemia y mitigar su repercusión en aspectos de morbimortalidad. Uno de los obstáculos que se presentaban en Uruguay al momento de poner en práctica esta estrategia de detección, rastreo y seguimiento de casos de covid-19 era la escasez de recursos humanos entrenados a esos efectos - Salinas hizo un especial reconocimiento y agradecimiento en su exposición a los estudiantes y médicos retirados que colaboraron activa y honorariamente en esta tarea en nuestro país – por lo que el desarrollo de herramientas tecnológicas que asistieran en estos aspectos fue de un invaluable aporte. Se desarrolló la app Coronavirus.Uy, el rastreo mixto y la habilitación de farmacias para la realización de tests diagnósticos rápidos, entre otros.

Este proceso de desarrollo de herramientas tecnológicas permitió un acortamiento de plazos de detección de casos, lo que incidió positivamente para cortar cadenas de trasmisión del virus, a la vez que, por ejemplo, gracias al programa de seguimiento de aparición de síntomas mediante la app, también se pudo brindar atención inmediata.

Aunque en ninguno de los casos las herramientas tecnológicas sustituyen las formas tradicionales de asistencia - sino que se utilizan de forma complementaria- sí permiten optimizar tiempos y trámites, una ventaja no menor en momentos en los que, debido a la crisis, todo el sistema se encuentra más exigido. La baja sostenida de casos en la que se encuentra Uruguay hoy se debe a múltiples factores entre los que se resaltan la estrategia de rastreo de casos y el Plan Nacional de Vacunación Contra Covid-19.

Todas las autoridades expusieron con distintos énfasis las experiencias de sus países respecto a la pandemia que aunque diferentes, tuvieron aspectos comunes. En el cierre el Ministro de Salud de Chile repasó esos puntos coincidentes como, por ejemplo, la importancia de la adhesión y la confianza de la ciudadanía en las estrategias planteadas por los gobiernos. Pero lo más importante fue el entendimiento de todas las autoridades de que es necesario el intercambio y, sobre todo, la unión de todos los países para poder brindar a futuro una respuesta común más efectiva a una situación de crisis como la de la pandemia de covid-19.