Como política de Estado, la empresa pública UTE diseñará un nuevo modelo de negocios, a fin de optimizar la energía disponible en el país en beneficio de los clientes residenciales y así mejorar el precio y el confort. Además, el ente apuntará a profundizar la integración energética con los países de la región, a la vez que prevé la instalación de un millón de medidores inteligentes en los hogares en este período.

La conmemoración del 108°. aniversario de UTE tuvo lugar este miércoles 21 en el Palacio de la Luz, con la presencia del ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini, la presidenta de la empresa, Silvia Emaldi, autoridades de directorio y funcionarios. 

En su discurso, Emaldi destacó el trabajo de los empleados del ente en todo el país para enfrentar la pandemia de COVID-19, con el cumplimiento de protocolos y el mantenimiento de servicios y obras. Entre los desafíos a futuro, mencionó la mejora de la tarifa para los clientes y la eficiencia del servicio. Además, consideró necesario continuar el trabajo con los ciudadanos de las zonas más vulnerables, mediante acciones de inclusión social que mejoren la seguridad y regularicen el servicio, en un trabajo coordinado con el Ministerio de Desarrollo Social (Mides).

La presidenta de UTE también habló de la necesidad de promocionar y definir tarifas que permitan una mayor competitividad del sector productivo y profundizar la integración energética con Argentina y Brasil, para avanzar en la exportación de excedentes energéticos.

En materia de inversiones, el ente trabaja para renovar la central hidroeléctrica de la represa de Baygorria, ubicada en el departamento de Durazno. Asimismo, se anunció la instalación del primer parque solar fotovoltaico en Punta del Tigre, el cambio de tensión a 22 kilovoltios (kV) en Montevideo y la colocación de un millón de medidores inteligentes en el 100% de los hogares durante el período 2020-2025.  

Paganini consideró que UTE es una empresa pública modelo, pero que el negocio está cambiando y esa situación genera un desafío en la estructura de este. Es necesario trabajar en la eficiencia y reducir costos, ya que Uruguay requiere energía eléctrica competitiva y de calidad, apuntó.

El jerarca agregó que, en materia de movilidad eléctrica, UTE juega un papel clave en el suministro de energía, con la instalación de puntos de recarga para vehículos, apoyo tarifario y búsqueda de aliados para obtener un servicio integral con flotas públicas y privadas.