“Prevemos un crecimiento de la economía de 0,6 puntos porcentuales para el 2019 y de 2,6 para el 2020”, aseguró el ministro de Economía, Danilo Astori. "Para el año próximo esperamos tener un resultado mejor, estimulado por el crecimiento de la inversión del sector público en infraestructura, así como la confirmación de la planta de UPM. En la próxima semana esta meta será presentada en el Parlamento”, agregó el jerarca.

“Se está haciendo todo lo posible por recuperar niveles de crecimiento y, a través de ello, un mejoramiento del resultado fiscal”, sostuvo el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, tras participar este viernes 19 de la inauguración de la sede de Fonplata en Montevideo.

“Toda proyección contiene un riesgo, porque la realidad evoluciona; y no se puede realizar una previsión perfecta de lo que va a ocurrir”, dijo. “Se propone una evolución que, entendemos, será tal cual la pensamos, pero a veces esa realidad niega esa interpretación en la que se basa la proyección”, indicó.

“Nuestra proyección es que este año 2019 culminará con un crecimiento muy modesto, de 0,6 puntos porcentuales, pero creemos que el año que viene vamos a poder recoger efectos importantes, tanto de la inversión en infraestructura como del anuncio de la instalación de la  planta de UPM”, sostuvo.

“Vamos a seguir insistiendo en superar este momento de desaceleración con más inversión, lo cual requiere estímulos  y una situación internacional favorable”. "No queremos elevar la carga impositiva, porque no creemos que la población lo resista. Al mismo tiempo, queremos mantener los niveles que han permitido acceder a condiciones inclusivas de vida muy importantes durante  los últimos años. Eso hay que cuidarlo mucho”, puntualizó.

Tras ser consultado sobre si se puede esperar una mejora de la economía para el segundo semestre, dijo que se abrió una ventana de oportunidades a escala internacional con el descenso de las tasas de interés a escala mundial y los proyectos que ha dado a conocer la Reserva Federal (banco central) de Estados Unidos.   

“Esto no solo quita presión cambiaria, sino que abre oportunidades de inversión en otros países; porque al estar en descenso las tasas de interés, los capitales buscan otros destinos”, explicó. Entre esos destinos están los países emergentes, grupo del que Uruguay forma parte, agregó.

"Por esta razón, se puede esperar que nuevos flujos de inversión retornen a la región y, ojalá, a nuestro país”, subrayó.

Dijo, además que, para eso, no solo hay que confiar en el abaratamiento de los fondos financieros, sino poner en práctica estímulos importantes, para asegurar rentabilidad a la inversión.

“Esto es lo que viene realizando el Ministerio de Economía desde hace dos años, y es nuestra principal apuesta para recuperar niveles de inversión, mejorar niveles de empleo y al mismo tiempo tener un impacto fiscal positivo”, subrayó.  “Si el nivel de actividad aumenta, la recaudación del estado también aumenta”, puntualizó.