Unas 20.000 personas estudian en el interior del país, lo que representa el 16 % del total de la matrícula nacional, mientras que hace 15 años solo lo hacía el 4 %. El crecimiento se corresponde con una mayor presencia en el interior, inversión en infraestructura, unos 40.000 metros cuadrados en el presente, y un incremento de la cantidad de carreras que se dictan en esas sedes, que alcanzan el 50 % del total.

En los últimos años hubo una evolución importante de la presencia de la Universidad de la República (Udelar) en el interior del país. La matrícula es uno de los factores en los que más se visibiliza la descentralización de la educación. Hace 15 años, la cantidad de estudiantes que se formaba en el interior representaba el 4 % del total del alumnado de la principal casa de estudios, y actualmente se ubica en el 16 %. Esto significa que unos 20.000 estudiantes se desempeñan allí, mientras que antes lo hacían 3.000 alumnos, según explicó el presidente de la Comisión Coordinadora del Interior (CCI), Rodney Colina.

Entrevistado por la Secretaría de Comunicación, agregó que el aumento de la matrícula se corresponde con la creación de ofertas de carreras. Actualmente, en el interior la Udelar mantiene el 50 % del total de las propuestas en funcionamiento. “Unos años atrás no llegábamos al 10 %”, dijo. Las condiciones en las que se aprende también cambiaron, ya que se dispusieron los cursos de tal forma que muchos estudiantes puedan estudiar y trabajar, además de facilitar el acceso a becas, tanto alimenticias como de ayuda económica, detalló.

En materia de infraestructura, el jerarca informó que se concretó un cambio al incrementar de unos pocos metros cuadrados disponibles en el pasado a 40.000 edificados en uso en la actualidad. “Se construyeron edificios en Rocha, Maldonado, Treinta y Tres, Tacuarembó, Rivera, Salto y Paysandú, además de adquirir propiedades en distintas ciudades para resolver el tema locativo”, relató, en diálogo con un equipo de la Secretaría de Comunicación Institucional.

En 2014 y 2015 se crearon dos centros universitarios regionales (Cenur), el del litoral norte, que gestiona dos sedes, una en Salto y otra en Paysandú, y dos casas en Artigas y Fray Bentos, y el Centro Universitario de la Regional Este (CURE), que coordina dos sedes, en Maldonado y en Rocha, y la casa de Treinta y Tres. Próximamente se creará el Cenur del noreste, que incluirá las sedes de Tacuarembó y Rivera y la casa de Melo. 

El Gobierno invirtió en radicar docentes y facilitar la modalidad de profesores que viajen a trabajar en las distintas sedes. “El interior se convirtió en un hito de desarrollo de enseñanza terciaria a nivel nacional. Trabajamos en un plan que se presupueste para el próximo quinquenio, en el que serán necesarias nuevas inversiones para radicar docentes e investigadores que permitan consolidar carreras existentes y crear nuevas. No debemos detenernos en el crecimiento, hacerlo sería complicado para la Universidad y para los jóvenes”, indicó.

En este sentido, Colina enfatizó la importancia de la descentralización, y explicó que hay estudios que demuestran que, por ejemplo, en el Cenur de Salto, muchos de los que estudian, cerca del 40 %, no pertenecen a la región. Lo mismo ocurre en el este y en el noreste. “Hay una movilidad importante de jóvenes en todo el territorio, que era lo esperado. Hay carreras que solo se dictan en el litoral o en el este y no en Montevideo”, dijo.