Una nueva normativa creó una figura legal denominada “residencia por arraigo”, para brindar solución a ciudadanos de otros países que ingresen a Uruguay como solicitantes de refugio, pero no cumplan con las condiciones para obtenerlo. El decreto prevé residencias permanentes por arraigo laboral, trabajo por cuenta propia o arraigo familiar. Además, establece una residencia temporaria renovable de arraigo para formación.

El Poder Ejecutivo aprobó un decreto que crea la figura legal de “residencia por arraigo”, que permitirá resolver la situación migratoria de unas 20.000 personas que habitan de forma irregular en Uruguay.

La iniciativa aborda la situación de los migrantes que ingresan al país como solicitantes de refugio, que, tras obtener una resolución negativa debido a no cumplir las condiciones requeridas, permanecen en el territorio nacional de forma irregular. Ante este escenario, el decreto propone una solución legal a los migrantes que fueron rechazados y que además requieren contar con visa para ingresar Uruguay.

Las personas que pasen a estar comprendidas en la nueva figura legal podrán, luego, continuar el proceso para tramitar la ciudadanía legal, explicó el ministro de Relaciones Exteriores, Omar Paganini, en una rueda de prensa realizada este jueves 16 en la Torre Ejecutiva. Además, señaló que el decreto representa una “solución transitoria”, que también resuelve la posibilidad de reunificación familiar.

Asimismo, afirmó que la mayoría de las personas que podrán acogerse a la nueva normativa proceden de Cuba.

La nueva norma prevé tres tipos de residencia: por arraigo laboral o trabajo por cuenta propia (permanente), arraigo familiar (permanente), y arraigo para formación (temporaria renovable).

Hasta la fecha, la Comisión de Refugiados, organismo a cargo del procesamiento de solicitudes de las personas que ingresan al Uruguay como peticionarios de refugio, tiene pendiente de respuesta más de 24.000 trámites, según informó Cancillería en su sitio web.