El desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en nuestro país permitió que todos los trabajadores especializados en el rubro contaran con empleos calificados, exportaran sus productos y servicios a 52 países y generaran unos 400 millones de dólares al año, indica el informe temático elaborado por la Presidencia de la República.

En el informe emitido este jueves 5, el director de Zonamérica, Martín Dovat, aseguró que “la tecnología vino para quedarse en todos los rubros y nosotros, como país, estamos logrando acceder a mercados con productos premium, gracias a valores agregados como la trazabilidad”.

Para Dovat, “emprender en Uruguay es posible, y el único inconveniente que se puede tener es acceder a una cadena de capital que acompañe a las distintas fases de madurez del emprendimiento en cuestión”.

La exportación anual de las TIC es de 400 millones de dólares; actualmente, Uruguay exporta productos de TIC a 52 países, en especial, Estados Unidos.

Por su parte, el gerente general de la Central Lanera Uruguaya, Diego Saavedra, aseguró que el sector agropecuario transitó por cambios cualitativos gracias a la introducción de nuevas tecnologías y destacó, en especial, la “revolución ovina”.

Explicó que con el apoyo de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), la Central Lanera llevó adelante el proyecto Centro Tecnológico Ovino (CTO). “Fue el combustible para que los cambios se precipitaran y posicionó nuevamente al país a la vanguardia en lo que hace a la producción ovina en la región y en toda América”, aseveró.

Este proyecto benefició a 215 productores hasta el momento y permitió el incremento de las praderas en un 60 % y la productividad del trabajo en un 9 %.

En el informe también se menciona que existen lugares donde los emprendedores pueden apostar a sus proyectos. Ingenio, la incubadora del Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU), es uno de ellos; actualmente, nuclea a 22 empresas y a la fecha lleva incubados más de 150 emprendimientos.

El Instituto Polo Tecnológico de Pando, unidad académica de la Facultad de Química, es otro ámbito en el cual se desarrollan proyectos de investigación e innovación, de los cuales la mayoría cuentan con el apoyo de la ANII. Khem es una incubadora ubicada en este polo, que en la actualidad trabaja con más de 30 emprendedores y 13 empresas.