“La política de rehabilitación necesita actitud de trabajo y voluntad, y este convenio pone en sintonía esfuerzos entre organismos”, puntualizó el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, en la firma del acuerdo entre la Dirección Nacional de Apoyo al Liberado y el Comisionado Parlamentario para diseñar programas con la finalidad de insertar a las personas que cumplieron sus penas y quedaron en libertad.

“Tenemos 1.300 personas privadas de libertad menos, pero la mayoría está por defecto del sistema, por el cambio del Código del Proceso Penal, y no por buen funcionamiento de políticas de rehabilitación”, mencionó el ministro del Interior, Eduaro Bonomi, en la firma del acuerdo entre la Dirección Nacional de Apoyo al Liberado y el comisionado parlamentario penitenciario Juan Petit.

A través del acuerdo, se fomentará el diseño de dispositivos y programas de trabajo de preparación del egreso, apoyo a quienes vuelven a estar libres y de trabajo posterior a la penitenciaría, de forma de promover la reinserción social de las personas privadas de libertad o liberadas del sistema penitenciario.

El secretario de Estado recordó la fuerte inversión de la cartera desde 2010 en la reforma de la Policía, la ampliación en la cantidad de vacantes, el ingreso de operadores y la puesta a punto de un nuevo modelo penitenciario.

“Uruguay sigue siendo el único país de la región que continúa invirtiendo desde el Estado en el sistema educativo, salud, seguridad en vía pública, salarios y en empresas del Estado”, sostuvo Bonomi, quien ponderó que la política debe impulsar el trabajo obligatorio y considerar que las personas privadas de libertad tienen derechos y obligaciones.

Por su parte, Juan Petit reafirmó que este convenio está enmarcado en el proceso de generar ciudadanía y de ayudar en la rehabilitación social de las personas más vulnerables y débiles. “Ahora debemos pensar en cómo elaborar instancias y mecanismos para lograr el acompañamiento de las personas que quedan en libertad”, dijo.