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Tras una reunión con representantes de los sindicatos de la salud pública, los médicos y las emergencias móviles, el ministro del Interior, Jorge Larrañaga, garantizó la entrada de ambulancias y servicios médicos “en cada centímetro cuadrado del territorio nacional”. Además, no descartó mejorar el protocolo de ingreso a las zonas con problemas de seguridad y establecer líneas de comunicación directa con la Policía.

Un grupo de empresarios que impulsa la campaña “Nos cuidamos entre todos”, donó, este lunes 6, la primera de quince ambulancias equipadas que funcionarán como centros de tratamiento intensivo (CTI) móviles. A esto se sumarán insumos médicos, monitores y respiradores. El secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, exhortó a los uruguayos a permanecer en sus domicilios para reducir el riesgo de contagio de COVID-19.

Delgado participó de la entrega de este vehículo sanitario, que será gestionado por la Administración de los Servicios de la Salud del Estado (ASSE) para su uso en una localidad del interior del país. El jerarca estuvo acompañado durante la ceremonia, en el Hospital Español, en Montevideo, por el prosecretario, Rodrigo Ferres; el presidente del organismo, Leonardo Cipriani, y, en representación de los empresarios, por Ariel Pfeffer.

El grupo “Nos cuidamos entre todos” también prevé la entrega de 30.000 equipos para el diagnóstico de coronavirus, 100 respiradores, 100 monitores para CTI y 25.000 mamelucos confeccionados en nuestro país. A esto se sumarán 57 monitores y respiradores adicionales para ASSE.

La delegación y las autoridades del centro hospitalario recorrieron un sector en refacción que funcionará como un centro COVID, con 23 camas de CTI y 80 de cuidados intermedios. Estas instalaciones, junto a las del hospital de Salto, también de ASSE, contarán con espacios preparados especialmente para atender la emergencia sanitaria, apuntó Delgado.

La ambulancia es la primera de un grupo que se entregarán en las próximas semanas. Los vehículos, aún sin estrenar, están totalmente equipados para funcionar como un CTI móvil con los requerimientos establecido por el Ministerio de Salud Pública. El grupo de empresarios lleva recaudados 4,5 millones de dólares desde que inició sus actividades, el 19 de marzo, y continuará hasta que la situación esté solucionada, explicó. Hasta ahora hay 140 empresas y más de 2.000 personas que aportan.

Reuniones con autoridades públicas y privadas de la salud

Delgado sostuvo que hay capacidad para realizar un mayor número de test a posibles portadores del coronavirus COVID-19. Anticipó que, entre hoy y mañana, aumentará la capacidad de diagnóstico y aclaró que parte de las pruebas fueron utilizadas para los pasajeros y tripulantes del crucero de bandera australiana que permanece en la bahía de Montevideo.

Dijo que se realizará un cordón sanitario rápido, que permitirá viajar a las personas a bordo que no estén infectadas a sus países de origen y transformar el buque en un hospital que atienda a quienes manifiesten síntomas, que utilice la modalidad de telemedicina y presencial con personal especializado.

Delgado adelantó que el martes 7 se realizará en la Presidencia de la República una reunión general con todos los actores del sistema, en la que participarán, además de representantes de este cuerpo, autoridades de ASSE, de las mutualistas de capital e interior, de las cámaras de emergencia médico móvil, del Sindicato Médico del Uruguay, de la Federación Médica del Interior (FEMI) y de la Sociedad Anestésico Quirúrgica.

Este ámbito, precisó el secretario Delgado, analizará los aportes de mejora; en la emergencia sanitaria. Al día siguiente, se realizará otra reunión en la sede de la Presidencia, para la que se convocó a autoridades del Ministerio de Salud Pública, del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y gremios de trabajadores privados y públicos de la salud, con el mismo fin.

Delgado reiteró la necesidad de cambiar los hábitos y exhortó a los uruguayos a permanecer en sus casas porque “la conducta de cada uno condiciona la salud de todos”. Recordó que en el inicio la campaña de vacunación se dirigirá principalmente a los sectores con más riesgos, personal de salud, inmunodeprimidos, entre otros, y que seguirá, de acuerdo a un cronograma, con personas mayores y embarazadas.