Un convenio suscripto por la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) y el Ministerio de Defensa Nacional permitió construir un block quirúrgico y servicio de farmacia en el Hospital de Ojos. La construcción y equipamiento de la sala quirúrgica demandó cuatro meses, una inversión de 2,4 millones de pesos, y permitirá aumentar las 700 intervenciones actuales que se efectúan por mes a 1.100 mensuales, desde agosto.

El ministro de Defensa Nacional, Javier García, el presidente de ASSE, Leonardo Cipriani, y demás integrantes del directorio del organismo, junto a la directora del Hospital de Ojos, Sandra Medina, participaron este miércoles 7 de la inauguración de un block quirúrgico y servicio de farmacia. Las obras se concretaron en el marco de un convenio entre ASSE y Sanidad Militar de Defensa Nacional.

“Hoy somos una nueva unidad ejecutora que surgió en la presente administración de los servicios de salud”, celebró Medina, en alusión al Hospital de Ojos.

Se desarrollan contraprestaciones en equipamiento que ofrece Sanidad Militar por concepto de cirugías a efectivos militares. En ese sentido, anunció la incorporación de dos ecógrafos y un tomógrafo de frecuencia óptica para mejorar los diagnósticos a los usuarios.

Informó que el Hospital de Ojos realizó más de 3.150 cirugías y agregó que desde hacía tres años se procuraba la inauguración del block quirúrgico que se concretó en la presente jornada. Esto permitirá, desde agosto, incrementar la oferta de 400 cirugías adicionales, lo que elevará la oferta a unas 1.100 cirugías mensuales, destacó.
En tanto, Cipriani recordó que al inicio de la actual administración se resolvió potenciar el Hospital de Ojos por las características del servicio y el número de intervenciones. El “primer gesto” en esa dirección fue que dejara de ser un “apéndice” y pasara a ser una unidad ejecutora, explicó. Dijo que la farmacia, anteriormente, ofrecía su servicio en forma compartida con el Centro Hospitalario del Norte Gustavo Saint Bois y el Hospital de Ojos, y que se entendió que este último debía contar con su propia farmacia. Esto redujo el promedio de permanencia de pacientes en el nosocomio desde que solicitan un fármaco hasta que lo obtienen, lo que ahora se concreta en unos 10 minutos.

El jerarca indicó que, si la obra se hubiera realizado sin la ayuda de las Fuerzas Armadas, ASSE habría desembolsado una cifra de entre 9 y 10 millones de pesos, pero invirtió un importe muy inferior, que estableció en 2,4 millones. En este monto se incluye el equipamiento del block quirúrgico. Los tiempos de construcción también se redujeron: el block quirúrgico se erigió en un período de cuatro meses y la farmacia insumió un mes.

En ese sentido, señaló que la complementación público-público se puede concretar en forma “rápida y no burocrática” y enumeró una serie de antecedentes alentadores desde 2020 a la fecha de acuerdos entre ASSE e instituciones estatales, como el Ministerio de Transporte y Obras Pública, Antel, OSE, Mevir y Fuerzas Armadas. El mecanismo de complementación entre actores públicos también fue elogiado por el ministro García.

Cipriani admitió: “No podemos tener diferencias entre un paciente que se atiende en este hospital con el que se atiende en la mejor clínica oftalmológica de Montevideo. Ambos tienen que ser resueltos de la misma manera y en el mismo tiempo”.

Como objetivo, señaló que la conducción de ASSE debe lograr la descentralización del Hospital de Ojos. Al respecto, ejemplificó al mencionar que un paciente de Artigas no debería trasladarse hasta Montevideo para ser intervenido quirúrgicamente. En tal sentido, reconoció que es posible trasladar el equipo y, para lograrlo, el organismo dispuso de un llamado a licitación para adquirir vehículos.

Remarcó el proceso de descentralización para la atención de pacientes en oftalmología en el Hospital de Ojos, que es el centro de referencia nacional de ASSE.

Terapia intensiva

En otro orden, Cipriani admitió la presencia de pacientes con COVID-19 en tratamiento intensivo de ASSE, aunque señaló que el número tiende a la baja. Dijo que al día de hoy la ocupación total en terapia intensiva del prestador estatal es de 63%. Agregó que se permanecerá con la estructura de tratamiento intensivo, con 260 camas, más las unidades respiratorias agudas, con 61 camas.

Añadió: “Desde que se comenzó a trabajar con las camas en terapia intensiva todos los nuevos funcionarios ingresaron con las compensaciones correspondientes y los médicos a valor de funciones de alta dedicación. La institución tiene el compromiso de que una vez que se readecúe el número de camas, a largo plazo, los centros de terapia intensiva de ASSE, al igual que las unidades de diálisis, percibirán lo que indica el laudo”.

Unos 70.000 uruguayos padecen glaucoma, pero, debido a la falta de síntomas, la mitad lo desconoce y, sin la atención adecuada, puede derivar en ceguera. El Hospital de Ojos, que incrementó el año pasado en más de 50% la atención a pacientes con esa enfermedad, adquirió equipamiento quirúrgico para tratar a diferentes poblaciones, en especial, en el interior del país, informó la directora del centro, Sandra Medina.

El centro especializado en oftalmología de ASSE celebra la Semana Mundial del Glaucoma, evento anual, iniciativa de la World Glaucoma Association (WGA), y cuya finalidad es concientizar a la población sobre la existencia de esta afección y la importancia de la consulta al médico oftalmólogo.

Esta enfermedad degenerativa del nervio óptico afecta a entre el 2% y el 3% de la población uruguaya y se inicia por el aumento de la presión ocular de forma sostenía y crónica, lo que ocasiona la pérdida de visión desde la periferia hasta el centro del ojo. No obstante, sostuvo Medina, por la baja sintomatología, la población no se controla. “Es nuestra obligación como oftalmólogos captar a esos pacientes y realizar el debido examen”, manifestó.

La especialista aseguró que si del estudio oftalmológico surge la “tríada diagnóstica”, que incluye una presión ocular elevada y una alteración en el nervio óptico y el campo visual, se debe comenzar con el tratamiento.

El Hospital de Ojos, que desde este año es unidad ejecutora, busca mejorar los tratamientos ofrecidos en todo el territorio nacional, que tradicionalmente se realizan con colirios oftalmológicos, informó.

Para ello, el centro adquirió un equipo de ciclofotocoagulación con láser de diodo, portátil, lo que permitirá su traslado al interior del país y que los pacientes puedan prescindir, en parte, de los colirios. Además, indicó que este instrumento será de utilidad para los niños con glaucoma congénito y se compartirá su uso con el Hospital Pediátrico Pereira Rossell.

Si bien el principal factor de riesgo consiste en superar los 40 años de edad, la encargada del Departamento de Glaucoma de la institución, Andrea Fernández, señaló que cualquier paciente puede portar esta afección, sobre todo, si conlleva antecedes familiares en primera línea: padres, madres y hermanos.

Más de 4.700 pacientes atendidos durante la emergencia sanitaria

El Hospital de Ojos brinda asistencia a unos 3.000 usuarios con glaucoma por año; sin embargo, durante 2020, logró priorizar esta patología y atendió a 4.715 pacientes. Esto representa un incremento de más del 50% del rango histórico, precisó Medina.

La directora del centro explicó que estas acciones fueron posibles gracias a la prioridad para las nuevas consultas y las patologías crónicas. “Las otras enfermedades que tratamos nos dan un tiempo más y poseen una solución, quirúrgica o medicamentosa, y no conducen a la ceguera irreversible, como el glaucoma”, señaló.

Gracias a los más de 90.000 procedimientos en el Hospital de Ojos, de las cuales 60.000 fueron operaciones por cataratas, muchos ciudadanos volvieron a ver o mejoraron su condición de vida, dijo la directora del centro público, Sandra Medina, en la celebración por los doce años de trayectoria que se desarrolló en el Auditorio Nacional del Sodre, junto a jubilados y pensionistas de todo el país.

La celebración contó la participación de la vicepresidenta de la República, Lucía Topolansky, el ministro de Trabajo, Ernesto Murro y la ministra de Educación, María Julia Muñoz, entre otras autoridades. Durante el festejo, Medina recordó los inicios del Hospital con el proyecto “Operación Milagro”, llevado adelante primero por profesionales cubanos y luego con médicos uruguayos, hasta conformar un completo equipo con más de 200 funcionarios. En el centro público de salud se realizan cirugía de cataratas, cirugía refractiva (sobre todo en jóvenes) y oculoplastia.

Los usuarios de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) acceden a todas las prestaciones oftalmológicas. También se atienden usuarios de los prestadores privados, mediante convenios. Por otra parte, los usuarios provenientes del Banco de Previsión Social (BPS) con ingresos inferiores a 10 bases prestacionales (41.700 pesos) también tienen derecho a utilizar los servicios del hospital, así como los jóvenes que integran el PIT-CNT que cobran hasta cinco bases prestacionales (20.900 pesos).

“Este hospital cumple hoy la función de centro de referencia nacional. Nos dedicamos a todo el país. Queremos ser una red nacional de salud visual, de atención para todo el país, para prestadores públicos y privados. A esto se incorpora el Programa Nacional de Salud Escolar que, desde enero de 2019, está dentro de la esfera de ASSE. Ya son más de 13.000 niños controlados y 860 pares de lentes entregados, todo en forma gratuita”, indicó Medina.

Además de su plantel médico, funcionarios y auxiliares, el Hospital de Ojos dispone de tecnología de vanguardia e insumos de calidad. En los últimos ocho años se incorporaron unos 18 equipos, tanto para estudios diagnósticos como para tratamientos quirúrgicos. “No solo renovamos el equipamiento del hospital, sino que también adquirimos equipos portátiles para salir al interior, para cumplir con una función de cercanía hacia el usuario, a través de un equipo itinerante”, añadió.

Medina confirmó que en breve recibirán un microquerátomo lamelar para poder realizar un trasplante de córnea no penetrante, sino solo en un sector. “Esto es tecnología más que de avanzada”, afirmó la jerarca, quien entiende que el hospital está siempre a la vanguardia del desarrollo de la ciencia en la especialidad.    

Los usuarios del Hospital de Ojos que llegan del interior de Uruguay a Montevideo pueden trasladarse en ómnibus gratuito desde la terminal de Tres Cruces hasta ese centro de salud ubicado en el norte de la ciudad. Además, quienes deban permanecer más de un día pueden alojarse junto a su acompañante en una de las 10 habitaciones con baño privado de la sala Tarará, donde también ambos reciben alimentación sin costo.

A 12 años de la instalación del Hospital de Ojos José Martí, el centro alcanzará las 90.000 cirugías realizadas, de las cuales unas 60.000 fueron por cataratas. El hospital ofrece capacidad para la atención de todas las patologías de las alteraciones oculares y, además, atendió de forma ambulatoria a 700.000 usuarios. También incorporó 15 equipos de tecnología de vanguardia con una inversión que supera el millón de dólares.

El Hospital de Ojos “nació en 2007, como un centro de cirugía de cataratas, y en el correr de los años incorporó equipos para estudios diagnósticos y tratamientos quirúrgicos avanzados”, definió la directora del centro de salud, Sandra Medina, en diálogo con la Secretaría de Comunicación Institucional. Remarcó que, gracias al notorio progreso en la incorporación de tecnología, todas las etapas de la atención a las alteraciones de la vista son tratadas en este lugar, desde lo médico, preventivo, quirúrgico hasta la rehabilitación.

Quienes acceden a esos servicios son los usuarios del prestador público, pero también jubilados y pensionistas del sector privado, que son atendidos a partir del convenio firmado entre el Banco de Previsión Social (BPS) y las mutualistas.

También acceden los trabajadores activos, a través del acuerdo existente con el PIT-CNT. En 12 años consultaron 700.000 usuarios en el hospital. A ellos se suman unas 15.000 consultas resolutivas en el interior del país y 9.000 controles a niños en escuelas a través del Programa de Salud Visual.

En setiembre se totalizará la cifra de  90.000 cirugías, 60.000 de ellas de cataratas. Las restantes corresponden a operaciones en córnea (trasplantes, cirugía refractiva y cross linking para el tratamiento del queratocono). Para el segmento posterior del ojo se realizan vitrectomías y se colocan lentes intraoculares tóricos para quienes padecen astigmatismo, lo cual evita el posterior uso de lentes. También realizan cirugías focorrefractivas en jóvenes que no toleran los lentes o registran miopía elevada, y cuentan con un sistema de rehabilitación y prótesis oculares.

En cuanto al éxito de los procedimientos, Medina explicó que la cirugía de cataratas genera un muy buen pronóstico visual en el 99 % de los casos, cuando no hay otra patología asociada. En otras intervenciones del segmento posterior del ojo los resultados pueden ser distintos en función de otras afecciones, como por ejemplo la diabetes, que reduce los pronósticos visuales en pacientes con una retinopatía avanzada, complementó.

En estos años se incorporaron al hospital unos 15 equipos de tecnología avanzada, con el financiamiento de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) y el apoyo de instituciones con las que esta entidad mantiene convenios, lo que implicó una inversión superior a 1,1 millones de dólares. Estas mejoras permitieron que se pueda realizar unas 50 cirugías diarias, cerca de 1.000 por mes, mejorándose el promedio del centro.

Las primeras incorporaciones de equipos se destinaron al área de diagnóstico y tratamiento. Actualmente se apunta a renovar el equipamiento adquirido en 2007 para acompasar el avance tecnológico y a comprar equipos portátiles para cumplir con las acciones en el interior. En breve se incorporará un microquerátomo que permite realizar un corte en la cornea y con ello un trasplante de córnea lamelar que evita el rechazo del receptor al donante.

Actualmente trabajan 40 oftalmólogos uruguayos y cinco de la brigada cubana que acompaña desde el inicio del proceso. Además, son varios los médicos del interior que comparten horas con el hospital. En paralelo se reciben médicos residentes desde el año 2009, habiendo pasado ya 40 en 10 años. La mayoría de ellos, una vez recibidos, concursa para acceder a un cargo en la institución.