Finalmente, el juez Marcos Seijas resolvió el procesamiento con prisión domiciliaria de Michelle Suárez, por delitos de estafa, falsificación, adulteración de documentos y falso testimonio.

En tanto, la fiscal del caso, Silvia Mascaró, había pedido el procesamiento con prisión de la ex senadora, pero el juez entendió que la prisión debía cumplirse en domicilio, dado que la abogada trans no puede moverse por sus propios medios.

Se estima que Suárez falsificó decenas de firmas, algunas para acelerar trámites, otras para perjudicar a la otra parte y en otros casos para beneficio propio.

La falsificación de firmas responde, entre otros a un caso en que un padre perdió el derecho de ver a su hija luego que la abogada le falsificara una firma de renuncia a la patria potestad.

La Suprema corte de Justicia analiza la suspensión del título de la profesional, considerando los delitos cometidos. Suárez, que admitió que mintió en la declaración realizada ante el máximo órgano de Justicia en el caso de la pérdida de patria potestad, será sometida a pericias psiquiátricas para conocer su estado de salud mental.