El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, anunció que el 1.° de julio aumenta el salario mínimo nacional a 15.650 pesos, y que a partir de enero de 2020 llegará a 16.300 pesos. Desde julio también se incrementará la pasividad mínima a 12.462 pesos. El jerarca recordó que en los últimos 12 años la jubilación o pensión mínima se triplicó.

En diálogo con la prensa, una vez finalizada la firma de un convenio entre el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop) y el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) el miércoles 22, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, se refirió a la evolución sostenida del salario mínimo nacional y la pasividad mínima en el país.

Informó que están previstos los decretos para los próximos aumentos del salario mínimo nacional que, a partir del próximo 1.° de julio, variará, de los actuales 15.000 pesos a 15.650 pesos. En enero de 2020 se ubicará en 16.300 pesos.

También el 1.° de julio aumenta la pasividad mínima en el país, que alcanzará los 12.462 pesos. En los últimos 12 años la pasividad mínima (jubilación o pensión) se multiplicó por tres en términos reales, indicó Murro.

“En 2007 pusimos como valor base una BPC (base de prestaciones y contribuciones), la que suele ajustarse por precios, es decir, mantiene el valor real. Con el aumento del 1.° de julio vamos a tres BPC”, argumentó el ministro.

“El salario mínimo nacional alcanzó su nivel más alto desde el retorno a la democracia”, describe el proyecto de Rendición de Cuentas que analiza el Parlamento. Creció un 10 % en términos nominales en enero de 2017 y 9,5 % en enero de 2018, y se ubicó en los 13.430 pesos. El texto propone que llegue a 15.000 pesos en 2019 y a 16.300 en 2020. Asimismo, el salario real creció un 55,5 % desde 2005.

“En concordancia con lo establecido en la sexta ronda de los Consejos de Salarios, el salario mínimo nacional (SMN) creció un 10 % en términos nominales en enero de 2017 y un 9,5 % en enero de 2018, y se ubicó en los 13.430 pesos”, detalla el proyecto de Redención de Cuentas presentado por el Poder Ejecutivo al Parlamento nacional. Asimismo, propone que llegue a 15.000 pesos en 2019 y a 16.300 en 2020.

Señala que los ajustes nominales de salarios propuestos en la negociación colectiva junto con la reducción de la inflación permitieron una expansión del salario real del 3 % en 2017. Así, el salario real promedio aumentó un 55,5 % desde 2005, cuando se convocó nuevamente a los Consejos de Salarios. En el mismo período, el poder de compra del salario mínimo nacional se multiplicó por encima de tres veces y se ubica actualmente en el nivel máximo desde el retorno a la democracia.

Además, resalta que Uruguay mejoró la distribución de los ingresos: mientras en 2006 los hogares que integraban el 10 % con mayor poder adquisitivo ganaban casi 18 veces más que los hogares de menor poder de compra, en 2017 esa relación descendió a 11 veces.

“Esto implica que el país hoy se encuentra, en materia de distribución del ingreso, en una posición notoriamente superior en relación a las décadas pasadas, al tiempo que mantiene su compromiso de continuar profundizando los procesos que permitieron alcanzar estos logros”, sostiene el documento.