El director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Álvaro García, señaló que “la Militar es la única caja paraestatal que no ha sido reformada” y en los últimos ocho años ha sido asistida con montos “por encima del aporte entregado a los gobiernos subnacionales o a la protección social”, La relación fue, el año pasado, de 16.843 millones de pesos, frente a 16.327 y 14.517, respectivamente.

“Muchas veces se discute la Ley de Rendición de Cuentas sobre un pequeño margen de todo lo que es el presupuesto general y, por eso, en la próxima, se anexará un informe para aclarar las prioridades”, señaló García, este jueves 17, en declaraciones a la prensa, tras participar de Prospectiva en Bioeconomía Forestal al año 2050, en el anexo de la Torre Ejecutiva, sede del gobierno nacional.

García insistió que “un 25 % del Presupuesto Nacional se destina a previsión social, ubicada en la primera prioridad, seguida por educación y salud”. Agregó que, “si se observa la parte de previsión social, los aportes a la Caja Militar se sitúan entre la sexta y séptima prioridad”. Recordó que “fueron reformadas todas las cajas paraestatales y la que resta es la Militar”.

También detalló que “en los últimos ocho años la asistencia a esta caja ha estado por encima de todas las transferencias a los gobiernos departamentales y municipales y a todo lo que suman los presupuestos destinados a protección social del Ministerio de Desarrollo Social (Mides) y el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU).

Un informe difundido por la OPP muestra que el año pasado se destinaron casi 16.843 millones de pesos a la Caja Militar, 16.327 a protección social y 14.517 a gobiernos locales y departamentales.

“La prioridad clara en Uruguay es la primera infancia, pero hay que invertir aún más”, enfatizó García en el encuentro para el intercambio de evidencias, lecciones aprendidas y buenas prácticas en Monitoreo y Evaluación, realizado este jueves 3 en Torre Ejecutiva.

El titular de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) agregó que “en próximas instancias presupuestales se debe tener una fuerte batería en ciencia, tecnología e innovación” y puso de ejemplo que “la biotecnología en Uruguay será uno de los complejos estratégicos clave”.

“Se debe tener una mirada transversal para lograr resultados y no perderse en la maraña burocrática del Estado”, expresó. “Mirar el Presupuesto nacional programáticamente ayuda a dar luz sobre donde hay que apuntar para cambiar las cosas”, recalcó. “Hay modificaciones que son cosméticas, pero hay otras que deben ser de fondo”, abundó.

Explicó que al analizar el Presupuesto nacional se ve que “25 % del mismo se destina a la previsión social, del que poco más del 21 % es para el BPS y el resto es para la Caja Militar”.

García repasó que “ese Presupuesto supera el destinado a toda la protección social, el Ministerio de Desarrollo Social (Mides), el Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU) y el resto de los programas y también a todas las transferencias monetarias a los gobiernos departamentales y locales”. “Esto lo ubica entre las prioridades presupuestales de hecho”, indicó.

También indicó que en la segunda prioridad, que es educación, se invierte 18 % del Presupuesto y en salud el 13 %. “Es necesario mirar el país con perspectiva larga para tener claras las prioridades”, sentenció.