El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, participó este lunes 29 en la implementación de un acelerador lineal de partículas en el Hospital de la Mujer del Centro Pereira Rossell. El equipamiento permitirá incrementar la cantidad de tratamientos de radioterapia y modificar su impacto, ya que se podrá irradiar la zona específica donde se encuentra el tumor. Actualmente, dicho servicio atiende unas 500 pacientes por año.

Estuvieron presentes en la actividad la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón; la ministra y el subsecretario de Salud Pública, Karina Rando y José Luis Satdjian, respectivamente, y la prosecretaria de la Presidencia, Mariana Cabrera. También asistieron el presidente de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Leonardo Cipriani; el director general del mencionado nosocomio, Ricardo Ayestarán, y la directora del Hospital de la Mujer, Risel Suárez.

Durante el acto, Argimón afirmó que integrar una administración que ubica al sistema público de salud a la vanguardia de la asistencia del continente es un orgullo. Cipriani sostuvo, en su intervención, que la salud es un derecho de la población que el Estado tiene la obligación de brindar.

El titular de ASSE explicó que el referido equipo de radioterapia integra un grupo de tres, adquiridos por la anterior administración en 2018. En la jornada de hoy, se instaló el último; los otros dos están ubicados en el hospital departamental de Tacuarembó y el Instituto Nacional del Cáncer.

Además, el jerarca subrayó que la construcción del espacio edilicio que contiene al dispositivo implicó una inversión de 500.000 dólares y los contratos de mantenimiento para los tres equipos, una erogación de 600.000 dólares. Por otra parte, informó que los tratamientos con el acelerador no solo serán brindados a pacientes de ASSE, sino también a usuarios del sector público, provenientes de los hospitales Policial y de las Fuerzas Armadas.

El nuevo acelerador permitirá brindar radioterapia a pacientes oncológicas y con tumores benignos. Cuenta con una tecnología de avanzada, que irradia el punto exacto donde se encuentra el tumor y posibilita ejercer una distribución uniforme de la radiación y evitar alcanzar otros órganos. Su incorporación propiciará aumentar la cantidad de tratamientos en un 50%, que, según Suárez, es de unas 500 pacientes por año.

Una vez finalizado el acto protocolar, el presidente recorrió las instalaciones y visitó el área de radioterapia.